Se evaluó como positivaFinalizó la primera etapa del plan de reinserción de reclusos
En Rocha las personas privadas de libertad ejecutaron un plan de prevención de incendios, con limpieza de malezas en toda la zona costera.
Tras una experiencia piloto de varios meses, que involucró a personas privadas de libertad de Rocha, Canelones, y Maldonado, finalizó la primera etapa del plan denominado "Doble Solidaridad". La iniciativa promovía la inclusión de presos al campo laboral. Entre febrero y mayo de 2011, 60 hombres y mujeres realizaron distintas tareas en la comunidad que oficiaron de preparación para sus próximas salidas. El Instituto Nacional de Rehabilitación, a partir del trabajo del Patronato Nacional de Encarcelados y Liberados, desarrolló este proyecto con la participación del Sistema Nacional de Emergencias y las cárceles departamentales. En nuestro departamento se realizó un acto de cierre de la primera fase en las instalaciones de la Chacra Policial, al que asistieron todos los participantes.
TRABAJO
En Rocha, la tarea consistió en un Plan de Prevención de Incendios Forestales, que incluía limpieza de terrenos y poda de árboles, y se cumplió en jornadas de seis horas de trabajo, en la zona costera. Para ello se había formado una “cuadrilla” de unos 20 integrantes, seleccionados por su buena conducta carcelaria. Los participantes del emprendimiento recibirán un pago nominal, además de obtener el beneficio de la Redención de Pena que establece la Ley. La experiencia piloto cumplió con sus objetivos: apoyar a las intendencias, y a la comunidad en general, en la tarea de prevención de incendios; facilitar la creación de hábitos laborales y la reinserción en el mercado de trabajo de los internos que participan de las tareas; y permitir explorar y poner en práctica mecanismos de coordinación y cooperación entre instituciones públicas.
OPORTUNIDADES
En declaraciones a la prensa, tras el acto de cierre global de esta experiencia en la Jefatura de Policía de Canelones, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, aseguró que la única forma de rehabilitación de personas privadas de libertad es terminar con el ocio y empezar una experiencia prolongada de trabajo, estudio y deporte. El jerarca comentó que recientemente firmó un convenio con el Instituto Nacional de Colonización para crear una colonia en El Espinillar, departamento de Salto, destinada a 22 reclusos y sus respectivas familias, para que trabajen en el lugar. La experiencia laboral será coordinada por el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Colonización cedió un aserradero al ministerio en comodato por 30 años. La intención es que los trabajos se realicen tanto con personas privadas de libertad, como con residentes de El Espinillar. Consultado por el compromiso del sector privado, Bonomi dijo que existe pero que quizás no sea suficiente. Anunció la firma de un acuerdo con la Cámara de la Construcción y el SUNCA para implementar cursos de capacitación de medio oficial albañil y generar posibilidades de que quienes participen se desempeñen en obra percibiendo una remuneración similar a la de cualquier ciudadano en libertad. También enfatizó que el Ministerio de Trabajo, el Ministerio del Interior y el Banco de Previsión Social proyectan una ley que permita el empleo que privados de libertad puedan cobrar un sueldo con aportes jubilatorios incluidos además del peculio o pasantía.
Asimismo, existe una donación de rotarios por 310 mil dólares para hacer una experiencia de trabajo agropecuario en el Centro 2 del Penal de Libertad. Se pidieron 30 puestos para reclusos en la cárcel de Juan Soler.
SISTEMA
Para acceder a estas oportunidades, las personas son seleccionadas por el Instituto Nacional de Criminología (INACRI), donde se tiene en cuenta el motivo por el que fueron encarceladas, la conducta en prisión y la relación con la familia. “No creemos que la experiencia de trabajo deba hacerse independientemente de la clasificación, debe ser producto de ella. Habrá personas privadas de libertad que podrán trabajar en cárceles, quienes puedan salir y volver, y quienes puedan salir y quedar en un campamento de trabajo”, explicó Bonomi.
En el sistema que las autoridades planifican, todas las personas privadas de libertad tienen que estar clasificadas. Cuando sean procesadas deben ir hasta por 15 días a un centro de diagnóstico para que distintos especialistas determinen qué tipo de tratamiento tienen que tener (alta seguridad, media o baja) y si están o no en condiciones de trabajar.
El director del Patronato de Encarcelados y Liberados, Jaime Saavedra recordó que en el Complejo Penitenciario Santiago Vázquez (COMPEN) se están haciendo los primeros bloques para el Plan Juntos
En el sistema que las autoridades planifican, todas las personas privadas de libertad tienen que estar clasificadas. Cuando sean procesadas deben ir hasta por 15 días a un centro de diagnóstico para que distintos especialistas determinen qué tipo de tratamiento tienen que tener (alta seguridad, media o baja) y si están o no en condiciones de trabajar.
El director del Patronato de Encarcelados y Liberados, Jaime Saavedra recordó que en el Complejo Penitenciario Santiago Vázquez (COMPEN) se están haciendo los primeros bloques para el Plan Juntos
COMUNICADO
Además de recibir planteos o inquietudes se reciben planteos de vecinos del departamento relacionados con la necesidad de organizar reuniones barriales para tratar los temas que los vecinos tengan interés en charlar o recibir información.
Atendemos planteos telefónicos al 44723051.