El presidente José Mujica puntualizó este viernes por la
tarde que de los cinco prisioneros de la cárcel de Guantánamo que recibirá
Uruguay en calidad de “refugiados”, cuatro son sirios y uno palestino.
Tras la inauguración de la nueva planta de agua potable de
Aguas Corrientes, en Canelones, el mandatario afirmó que estas personas no
representan “ninguna peligrosidad” y que “por eso los largan”.
Además, dijo que 18 países están interviniendo en los planes
de Estados Unidos de recibir presos actualmente alojados en ese
establecimiento.
“Algunos (de los presidiarios) pudieron volver a sus países
natales, pero sus condiciones son distintas”, afirmó Mujica, quien ejemplificó
con Siria, que se encuentra “en guerra”.
“Han estado sin juez, sin fiscal, sin nada. Creo que hay que
contribuir a que eso desaparezca”, añadió en línea con lo expresado horas antes
en su audición de M24.
Consultado sobre el pedido a Estados Unidos de liberación de
los presos cubanos en suelo americano, Mujica dijo que “Uruguay es pequeño” y
“no puede imponer”, pero que “hay que ayudar a distender todo lo que se pueda”.
“Parece que nos estamos volviendo cobardes y que tenemos
miedo de patear el hormiguero”, arremetió al ser consultado por los
cuestionamientos hechos desde la oposición.
Defensa no interviene
Por otra parte, el subsecretario de Defensa Nacional, Jorge
Menéndez, reconoció haberse enterado por la prensa de la situación.
El jerarca afirmó que el tema no es competencia de su
cartera, sino de Cancillería e Interior. Por el momento, la custodia militar a
los cinco refugiados no está prevista.
“Como ciudadano pienso que lo que hace (el presidente) tiene
que ver con el punto de vista humano”, consideró, al tiempo que reconoció que
esas cinco personas “han sido secuestradas” y “no han sido juzgadas”.