lunes, 24 de septiembre de 2012

ENCUESTAS SOBRE GOBIERNO NACIONAL


Sí a la baja

El Frente Amplio parece acusar cierto desgaste en el gobierno –seis años en el nacional y veintidós en Montevideo– a juzgar por la últimas encuestas. Mujica tiene el mayor nivel de desaprobación .
Texto: Nelson Díaz 




Si se tiene en cuenta el crecimiento económico del país, resultan paradójicos los resultados dados a conocer esta última semana por la encuestadora Cifra sobre el desempeño del presidente de la República. La explicación de los resultados puede estar sustentada por el desgaste natural a mitad de un mandato, la rendición de cuentas y la andanada de conflictos sindicales en la esfera pública, sobre todo en la educación y la salud.




Según el relevamiento de Cifra, por primera vez desde el inicio de su administración José Mujica recoge 42 por ciento de desaprobación, mientras que 36 por ciento aprueba su gestión. El restante 22 por ciento está en una posición intermedia. No obstante, desde una lectura más optimista, podría esgrimirse, sumado ese estado “intermedio” al 36 por ciento, que más de la mitad de los consultados ve con buenos ojos su desempeño.

El sondeo (dado a conocer por Canal 12) sostiene: “Hoy una mayoría relativa de la población desaprueba la gestión del presidente. Es la primera vez en un gobierno del Frente que esto ocurre (aunque era lo habitual en los gobiernos colorados y blancos). Mujica sigue recibiendo la aprobación de más de la mitad de los votantes frentistas;; sólo el 18 por ciento opina que el presidente se está desempeñando mal. Casi uno de cada cuatro, sin embargo, no expresa opinión ni en un sentido ni en el otro, cosa rara entre los frentistas, que tienden a ser muy opinadores”, agrega la encuesta de la empresa del politólogo Luis Eduardo González.

Desglosado por opinión y filiación política, el relevamiento señala que los votantes de la oposición emitieron un juicio mayoritariamente crítico sobre la gestión del presidente. De hecho, ocho de cada diez blancos y casi ocho de cada diez colorados expresaron su desaprobación.

Sin embargo, y a contrapelo de los guarismos consignados, la popularidad personal del mandatario se mantiene mejor en relación a la evaluación de su gestión. El 43 por ciento simpatiza con Mujica mientras que el 30 por ciento expresó antipatía. Dentro de la masa de votantes del oficialismo, el presidente recoge la adhesión de más de siete de cada diez frenteamplistas.

“Como sucede en general en la política uruguaya, el presidente como persona es juzgado menos críticamente que el presidente como gobernante”, sostiene el informe de Cifra.

Consultada por Caras y Caretas, la presidenta del Frente Amplio, Mónica Xavier, dijo que las encuestas “son instrumentos en los que hay que apoyarse pero sin dramatizar porque la fuerza política está en condiciones de revertir los resultados”.

No obstante, reconoció que desde la coalición ya se visualizaban algunas de estas señales de alarma. De hecho, en los documentos de coyuntura, sometidos a discusión en la interna, se evaluó desplegar una presencia más activa de la fuerza política en todo el territorio nacional –incentivando a la militancia–. “Estamos en condiciones de mejorar algunas cosas que pueden estar en la base de estos resultados”, sostuvo Xavier.

En tanto, el vicepresidente del partido de gobierno, Juan Castillo, precisó que las encuestas, a juicio personal, tienen una carga de subjetividad. “Hay todo tipo de encuestas y de encuestadores”, dijo a Caras y Caretas. “Hoy estamos lejos del período electoral y no creo que ni la décima parte de los compatriotas esté preocupada por los candidatos. Normalmente a esta altura de la gestión tanto nacional como municipal ha ocurrido siempre una baja en el respaldo”, agregó.

Consultado sobre los resultados de la encuesta a nivel municipal, el ex dirigente sindical afirmó que Ana Olivera tiene dos características que no se perdonan en Uruguay: ser mujer y comunista. En este contexto, Castillo hizo un llamado a solucionar los problemas en la interna, al criticar a aquellos frenteamplistas que “siguen la lógica de los partidos de derecha buscando sacar rédito, hipotecando así la continuidad del gobierno departamental”.