lunes, 1 de septiembre de 2014

Una Ruta para que no transiten sueños ,una ruta para hacerlos realidad.

LA 109 
Mario Barceló.


UNA ZONA DE SIERRAS DONDE LA HÁ VALE HASTA 8 MIL DÓLARES
DONDE TRABAJAN O VIAJAN PARA TRABAJAR MÁS DE 200 PERSONAS TODOS LOS DÍAS
EN LA QUE SE CULTIVAN TRADICIONES FAMILIARES DE VARIAS NACIONALIDADES
EN LA QUE LOS APELLIDOS SE EXTIENDEN ENTRE AIGUA Y ROCHA





Históricamente ha sido uno de los territorios más fuertes en el proceso fundacional de los enclaves urbanos, porque fueron los territorios donde primero se hizo ganadería y agricultura.
Las Sierras de Rocha, Siete Cerros y las sierras del Este del Lavalleja y Norte de Maldonado formaron parte de la colonización en los tres siglos pasados, generaron las primeras curtiembres, saladeros familiares, graseras y moliendas de trigo y maíz. Allí la materia prima agrícola generó el capital urbano de las ciudades de hoy: Aiguá y Rocha. Por lo menos.
En esos territorios viven hoy familias uruguayas y extranjeras, muchos de cuyos integrantes son parte de la mano de obra asalariada de todas las producciones actuales de ganadería, agricultura, fruticultura y forestación.
Otras tantas personas viven y trabajan sus campos, chicos y medianos.
Otros tantos viajan todos  los días desde Aiguá y desde Rocha, barrios y aledaños de ambas ciudades, a trabajar en su campo o en campo de otros.
Ese territorio, ignoto para muchos, que articula la economía y la vida de unas 1500 personas en la actualidad, es uno de los territorios con más demanda en las transacciones inmobiliarias. Cualquier “chacrita” que esté en ese territorio está en igualdad de condiciones que el más extenso de los campos en el mercado inmobiliario de Maldonado, Rocha o Lavalleja:  una hectárea tiene como “piso” de valor los 4 mil dólares y puede remontar hasta los 8 mil dólares. De ello dan testimonio las carteleras empresariales y los últimos negocios hechos en Rocha.
Verdaderamente ES UNA ZONA GEOGRÁFICA,ECONÓMICA y SOCIAL de gran importancia actual.
Es una excelente decisión la que se ha tomado al volcar los recursos económicos del Impuesto al Patrimonio para construir a nuevo y asfaltar luego la RUTA 109, en esa zona de nuestra región.