Se trata de una “hipótesis de trabajo”, añadió la secretaria
de Estado, quien sostuvo que una vez aprobada la norma convocará a dialogar a
los empleados del sector químico, que manifestaron su rechazo a la venta de la
droga en las farmacias.
La comercialización de la sustancia en esos puntos de venta
fue propuesta por los empresarios del sector, aglutinados en el Centro de
Farmacias del Uruguay.
La ministra informó que dialogará con los empleados químicos
para profundizar en los motivos del rechazo a vender marihuana en los
establecimientos. Además, dijo que la venta de la droga podría incluirse en una
reforma de la regulación de las farmacias comunitarias, que tienen una
reglamentación “que ha quedado obsoleta”.
El secretario de la Asociación de Química y Farmacia del
Uruguay, Eduardo Savio, dijo a El País el viernes que tienen fuertes reparos.
"Estamos muy preocupados por el posible desprestigio de
la actividad, porque hoy la propia farmacia comunitaria tiene la obligatoriedad
de entregar medicamentos controlados y con receta verde; pero a veces no se
cumple con eso. Nos preguntamos qué pasará mañana si el químico detecta que se
entregaron más cigarrillos que los registrados", indicó Savio.
"La manera elegante de decir que no es dejar la
dirección técnica. Creo que corren el riesgo de que no tengan químicos para las
direcciones y entonces las farmacias van a dejar de ser farmacias y van a pasar
a ser lo mismo que un kiosco, porque no habrá garantías de que los procesos
estén autorizados por químicos", añadió en declaraciones al matutino.