martes, 28 de agosto de 2012

sin marcha atrás y con visiones encontradas


.Hay vecinos que se oponen, pero otros lo ven complementario al turismo

El proyecto que impulsa el Poder Ejecutivo para ampliar el puerto de La Paloma en Rocha no tiene marcha atrás y comenzó a recibir apoyos en el balneario, de residentes y comerciantes que lo ven complementario del turismo.
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Tampoco tiene marcha atrás el impulso del presidente José Mujica de instalar un puerto de aguas profundas unos kilómetros más al Este, en El Palenque, a metros de La Pedrera, que el fin de semana también recibió una manifestación en su contra .
La obra del puerto maderero en La Paloma, ya encaminada, no solo recibe apoyos sino que también enfrenta resistencias. Por ello ayer debió intervenir la Guardia Republicana para detener a vecinos que se pusieron delante de las máquinas. Los que se oponen “son una minoría”, dijo ayer el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa.
“Se garantiza la continuidad de la obra”, remarcó Cánepa en un mensaje claro a los manifestantes.
 “El gobierno no tiene dudas en aplicar lo que deba aplicar para seguir adelante”, afirmó.
En total había 70 efectivos policiales que actuaron por orden judicial para reprimir la manifestación que quería evitar que se retomaran los trabajos en el acceso al puerto que conecta en un tramo de seis kilómetros con ruta 10.
Los que están a favor se manifiestan menos, dijeron a El Observador vecinos de La Paloma.
José Prieto, que tiene una empresa de servicios portuarios, comentó que La Paloma “se desarrolló con el puerto pesquero funcionando”, por lo que no ve la incompatibilidad de que el puerto se abra a otros rubros. Por su parte, Daniel Silveira, propietario de un hotel en la zona, dijo a El Observador que el acuerdo firmado entre el Poder Ejecutivo y la Intendencia de Rocha, asegura la convivencia de las actividades portuarias y las turísticas. Además “la ciudad está creciendo hacia el Oeste y el puerto está al Este”, afirmó. El empresario cree que las protestas provienen de vecinos que desconfían del convenio que estableció las características de la obra. En la misma línea, Pablo Scaffo, un marino retirado poblador de La Paloma, comentó que es perfectamente compatible lo portuario con lo turístico. “Además el turismo son 40 días y después hay que vivir todo el año”, afirmó.
El proyecto de convertir la terminal oceánica para que se puedan sacar rolos de madera hacia la planta de UPM en Fray Bentos, tiene como base un convenio firmado por los ministerios de Transporte y Turismo con la Intendencia de Rocha. Ese documento que selló un acuerdo político estableció, no sólo los detalles del emprendimiento, sino limitaciones al tránsito de cargas, la prohibición de que los camiones ingresen a la planta urbana del balneario y puso topes, en 250 mil toneladas al año, la madera que se podrá sacar a  través del puerto.El apoyo también lo expresó el diputado Anibal Pereyra (Frente Amplio).
El que lo rechaza es el alcalde de La Paloma, Alcides Perdomo  para quien está en juego “el destino” del balneario.
La obra cuenta además con el apoyo del Partido Nacional. El diputado José Carlos Cardoso dijo ayer a El Observador que se respalda las mejoras para el puerto de La Paloma y también que haya otro de aguas profundas, aunque en ese último caso se mostró partidario de discutir desde “la forma, el tipo de desarrollo y hasta la ubicación”.
Ese otro puerto aún está verde, pero en el gobierno están dispuestos a ir a fondo, pese a que los consensos en la zona son menores aún que en La Paloma.