El Instituto Nacional del Cáncer y la Fundación Peluffo
Giguens lanzaron este jueves el primer BioBanco Nacional de Tumores.
Tiene como propósito diseñar tratamientos oncoespecíficos de
acuerdo a estudios genómicos para una enfermedad y paciente puntual permitiendo
así definir terapias dirigidas con alto impacto positivo de respuesta.
La puesta en funcionamiento de un banco de tumores en el
Instituto Nacional del Cáncer (Inca) permitirá centralizar toda la información
genética, historia clínica y de sistematización y vigilancia farmacológica de
pacientes que redundará en la eficiencia de la toma de decisiones clínicas
basadas en evidencia científica.
El director del Inca, Álvaro Luongo, explicó que se podrán
diseñar tratamientos específicos para cada tipo de patología. De esa manera, se
podrá estudiar las afectaciones genéticas y centralizar esos datos.
La información clínica permitirá generar un sistema de
vigilancia epidemiológica de los cánceres que existen en Uruguay.