Uruguay registró en 2013, último dato oficial recabado, 1,6 % de casos diagnosticados de “transmisión vertical” de VIH-Sida, 0,4 puntos porcentuales por debajo de lo exigido por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para considerar a un país en la etapa de eliminación del contagio de la enfermedad de madre a hijo.
Uno de los objetivos prioritarios del Ministerio de Salud Pública (MSP) es eliminar tanto la transmisión del VIH (virus de inmunodeficiencia humana) como de la sífilis, de la madre infectada a sus hijos, lo que se conoce como “transmisión vertical”.
Para ingresar en una etapa hacia la eliminación de la transmisión vertical se requieren cifras menores a 2 % (de cada 100 madres infectadas, dos o menos lo estén por esta vía). Uruguay se ubica en torno a 1,6 %, por lo que está ingresando en esa etapa, según confirmaron las autoridades del MSP.
En cuanto a sífilis congénita los datos señalan que Uruguay aún está en cifras más elevadas que las que solicita la Organización Panamericana de la Salud (0,5 x 10.000) para decretar que Uruguay es un país libre de esta enfermedad. Actualmente está en 2 x 10.000. De todas formas, aumentaron los controles de embarazo lo que hace confiar en que se podrá diagnosticar y tratar la enfermedad (se debe tratar la mujer embarazada y la pareja contagiante). Se estima que el año próximo se podría lograr esta meta.
En Uruguay hay unas 12.000 personas diagnosticadas con VIH-SIDA. Las autoridades informaron que la cantidad de casos detectados comenzó a mostrar un comportamiento descendente en los últimos años. En este escenario, uno de los objetivos fundamentales del Ministerio de Salud Pública es mejorar la accesibilidad al diagnóstico, tal como informaron en el Día Nacional del VIH-Sida, en la sede de esa Secretaría de Estado.
El porcentaje de personas afectadas con la enfermedad en la población general es menor al 1 % y en algunos colectivos esa cifra se eleva, como las personas privadas de libertad, los hombres que tienen sexo con hombres y personas trans. En 2014 se detectaron unos 1.000 casos.
Cabe consignar que se puede empezar el tratamiento con altas probabilidades de transformar esta dolencia en una enfermedad crónica, “y no hablar de una enfermedad necesariamente mortal” como sucede en gran parte del mundo, tal como comentó el ministro de Salud Pública, Jorge Basso, durante la presentación de los datos sobre VIH-SIDA y la sífilis congénita.
El MSP realizó un acto con motivo del Día Nacional del VIH-SIDA, presidido por el titular de la cartera, Jorge Basso, y acompañado por la subsecretaria Cristina Lustemberg, el director general del Salud, Jorge Quian, la responsable del área VIH del MSP, Susana Cabrera, y la presidenta del Directorio de ASSE, Susana Muñiz. El director Quian estuvo a cargo de la presentación de los datos.
En la oportunidad se dieron a conocer algunos datos sobre la epidemia. Las autoridades informaron que afecta fundamentalmente a la capital del país, pese a que existen casos en todos los departamentos.