Los ministros y subsecretarios de Economía y Ganadería
comparecen ante la Comisión Permanente del Parlamento desde las 9:30,
convocados por la oposición para dar cuenta de las medidas del gobierno a raíz
de la falta de pago de las ventas del sector lácteo nacional a Venezuela.
El miembro convocante, el diputado nacionalista Alejo
Umpiérrez, dijo al iniciar su exposición que “no quiere cabezas”, sino
“soluciones” para el sector lechero. Umpiérrez, además, reclamó que el
Ejecutivo se haga cargo de la deuda de 93 millones de dólares que Venezuela no
ha pago a los productores.
En ese sentido, reclamó medidas “concretas, no
cosméticas”. Y señaló que si el ministro
Tabaré Aguerre hace anuncios de asistencia a los productores será un “éxito”
del llamado a sala de esta jornada y de las protestas de los tamberos.
Para Umpiérrez, el gobierno “no defendió el interés
nacional” en el acuerdo con Venezuela a través del cual se cancelaba de manera
anticipada la deuda de Ancap con PDVSA a cambio de la compra de 250.000
toneladas de alimentos uruguayos por 267 millones de dólares.
Según dijo, fue un “zafarrancho” que el Estado haya
depositado el dinero del pago anticipado de la deuda de Ancap con PDVSA en un
banco de China, el China City Bank, lo
que no se había explicado cuando el Parlamento aprobó la ley que habilitaba el
pago anticipado de la deuda de la petrolera uruguaya con la venezolana.
“El dinero debía quedar en Uruguay” y “el gobierno lo
sabía”, manifestó en sala el legislador y consideró que el gobierno “estafó” a la oposición.
Umpiérrez sostuvo que el acuerdo de cancelación de deuda de
Ancap con PDVSA a cambio del pago de las compras de alimento uruguayo fue un
acuerdo entre gobiernos y no entre privados.
El año pasado, los presidentes Tabaré Vázquez y Nicolás
Maduro acordaron crear un fideicomiso que contemplaba la cancelación de la
deuda de Ancap a cambio del envío a Venezuela de 250.000 toneladas de alimentos
uruguayos por 267 millones de dólares.
Venezuela debía depositar el dinero en el fideicomiso
constituido en el banco Bandes Uruguay, a razón de 50 millones de dólares por
mes a través de giros de la Corpovex (Corporación Venezolana de Comercio
Exterior), pero en diciembre fue interrumpido el pago.
Ahí nace el reclamo del sector productivo, específicamente
del sector lácteo. Las empresas que se vieron afectadas son Claldy, Pili,
Calcar y Conaprole.
Umpiérrez indicó que estas empresas no pueden colocar esas
ventas no pagas a otros mercados porque, quizás, en un futuro, Venezuela podría
reclamar que se transporte de la mercadería. Y el tiempo pasa, dijo, y los
productos lácteos pueden vencer.
El diputado del Partido Nacional cuestionó la participación
de la empresa Aire Fresco como firma comisionista por la venta de los productos
a Venezuela.
Sostuvo que la comisión debía pagarla quien deposita el
dinero, es decir Corpovex y no las empresas lácteas uruguayas. Además,
cuestionó que exista un intermediario en la venta alimentos. “¿Tenemos que
pensar que acá también hay corrupción?”, preguntó el diputado.
RNU
Foto: Santiago Mazzarovich/adhocFotos.