DECLARACIÓN DEL PARTIDO NACIONAL
ANTE
UN
NUEVO PRIMERO DE MAYO
Especial
momento para reflexionar sobre la realidad actual de los trabajadores
uruguayos.
El
gobierno nos informa día a día de la bonanza económica por la que
está atravesando nuestro país: recuperación del grado de inversión
por parte de las calificadoras mundiales, altas reservas del Banco
Central, etc., pero no podemos desconocer la actual coyuntura
económica a nivel internacional: caída de las economías de los
países desarrollados. Esta situación ha comenzado a
repercutir en toda la economía mundial y nuestro país no queda
afuera de esa realidad. Tan no queda afuera que está afectando
la estabilidad de los puestos de trabajo de nuestra industria; la
caída de las bolsas de valores internacionales está generando
políticas proteccionistas de los países compradores, que imponen
trabas a nuestros productos de exportación, productos que le generan
valor agregado a nuestras materias primas.
Tampoco
podemos desconocer que, aún hoy, miles de compatriotas continúan
viviendo bajo la línea de pobreza. Y esta realidad es
incuestionable: más de 48.000 niños menores de 3 años son
atendidos diariamente en las casas del INAU, en donde se les provee
del alimento diario, alimentación que sus padres no pueden
brindarles porque sus salarios son insuficientes. Cada día hay más
gente –más de los que quisiéramos aceptar- viviendo en la calle,
familias enteras esperando en las puertas de los refugios para pasar
la noche, jóvenes lavando parabrisas en los semáforos, cuida coches
en todas las cuadras de la ciudad, hurgadores que circulan por todo
Montevideo con la basura sin las necesarias medidas de salubridad.
Puntualización
especial merecen los accidentes de trabajo que más allá de
lesionados, causaron el fallecimiento de varios trabajadores.
Ha quedado en evidencia la falta del control de las condiciones
laborales que debe ejercer el Ministerio de Trabajo y Seguridad
Social, esa falta de control queda evidenciada cuando en su propia
sede aconteció un accidente por falta de previsión en la toma de
medidas precautorias y además ante el conocimiento de las
permanentes denuncias del sindicato de sus trabajadores en relación
a las malas condiciones edilicias de sus instalaciones, huelgan más
comentarios.
En
la órbita pública, la realidad no es nada aliciente. No ha
existido espacio de buena voluntad para negociar; se han perdido
conquistas históricas de mejoras laborales y salariales alcanzadas;
compañeros han sido relegados de sus puestos de trabajo por el mero
hecho de no pertenecer a la coalición de gobierno y que a su vez no
aceptaron perder su calidad de funcionarios públicos para
convertirse en funcionarios del gobierno, por lo que, para estos
compañeros, persecución y hostigamiento, han sido moneda corriente;
técnicos asesores que cuestionaron las decisiones tomadas a priori
por ciertos jerarcas fueron dejados de lado, removidos, y sus
puestos fueron ocupados por personas menos calificadas, personas que
no reúnen los requisitos necesarios, pero que sí se avienen a las
condiciones impuestas por ciertos jerarcas.
La
inseguridad que predomina en todo el territorio nacional es
inaudita. Los trabajadores vemos invadidos nuestros espacios
por una ola de violencia que hasta ahora era desconocida para los
uruguayos y no advertimos que los responsables por nuestra seguridad
tomen las medidas necesarias para erradicar ese virus de nuestra
sociedad. No estamos de acuerdo con que tengamos que
defendernos personalmente de esta agresión.
Hubiera
sido nuestro deseo iniciar esta jornada con palabras de festejo,
ser portadores de buenas noticias. Cómo quisiéramos haber
iniciado esta jornada con un Salud!! a los compañeros trabajadores
por los logros alcanzados. Sin duda, como no participamos
de dobles discursos, sostener las reivindicaciones de los
trabajadores nos lleva a tener un dia más de lucha.
Montevideo,
1ro.
de mayo de 2012.
Ana
De Vita
Secretaria
General
SECTOR
SINDICAL
Leticia
Villar, Ana Picabea, Oscar Velázquez