El gobierno aún no cerró la negociación con el empresario
argentino Eduardo Constantini por el financiamiento del puente sobre la laguna
Garzón, que tendrá un costo cuatro veces superior al originalmente proyectado
para cumplir con los requisitos medioambientales establecidos por la Dirección
Nacional de Medioambiente (Dinama).
El ministro de Transporte, Enrique Pintado, compareció este
miércoles al Parlamento para explicar en comisión el avance de la negociación
con el empresario argentino, que se había comprometido a financiar la mayoría
de la obra cuando se había establecido que su costo rondaría los 4 o 4,5
millones de dólares.
No obstante, el actual proyecto supera ampliamente en tres o
hasta cuatro veces ese presupuesto, por lo que el ejecutivo de la vecina orilla
se niega a financiar la mayoría del emprendimiento.
Eso desató una ronda de contactos para que no desista de
participar en el financiamiento del puente, una obra polémica que genera
resistencia en algunos vecinos de Maldonado y Rocha.
Si bien Pintado no quiso revelar detalles de las
negociaciones, indicó que las conversaciones no están cerradas. “Estamos en
pleno proceso de discusión con el privado. Va a intentar que le salga lo más
barato posible y el Estado va a tratar de tener la menor erogación posible”,
afirmó.
Consultado sobre la posibilidad de tener que establecer un
sistema de peajes para recuperar la inversión del Estado en caso que la
erogación supere lo previsto, Pintado dijo que “es muy difícil” que el gobierno
no recurra a un instrumento que le permita obtener recursos. “Espero que no
haya peaje y que el Estado no tenga que poner nada, pero es muy difícil. Si
sale más caro, ya partimos del supuesto que algo el Estado tiene que poner”,
afirmó.