viernes, 16 de agosto de 2013

"Generamos el proyecto y la Norma" dijo Sabini.

 Jornada sobre "Control y regulación estatal del mercado de marihuana"  lleva adelante en la junta deptal de Rocha .  
Los diputados Sabini y Bango, redactores del proyecto de ley, resaltan que el objetivo central es brindarle a este consumo un marco regulatorio similar al de las demás drogas legales: alcohol, tabaco y psicofármacos.  


Julio Bango y Sebastián Sabini, encargados de "darle forma" al proyecto presentado, detallaron algunos aspectos de la iniciativa. Sabini explicó que el proyecto se elaboró teniendo en cuenta tres puntos de vista: el combate al narcotráfico, el aspecto sanitario y el de los derechos humanos.
 "Pensamos que las tres ópticas son válidas y le dan integralidad al tema", resaltó.

"Se partió de la base de que el consumo es un fenómeno que puede incidir negativamente en delitos, que puede ser doblemente perjudicial, ya que no se sabe lo que se está consumiendo, y que los que quieren hacer valer su derecho a consumir (legalizado en 1974) deben acudir a un espacio ilegal para adquirirlo", señaló.




Por otro lado, resaltó que la diferencia con la regulación de otras drogas, como el alcohol o el tabaco, es que los precios se fijarán administrativamente, no existirámarketing ni publicidad, ni patrocinios, ni promociones asociadas al consumo de la marihuana. "Esto significó pensar en un modelo muy distinto al que estamos acostumbrados", dijo.

También enfatizó que este proyecto tiene como planteo central reducir el consumo, fundamentalmente el problemático.

Informó que hasta el momento la discusión ha avanzado en lo relacionado a quiénes podrían comprar, distribuir y vender este producto y se espera a culminar con este ciclo de charlas para contar con una evaluación completa.

Aspectos centrales del proyecto
Julio Bango subrayó que se pretende minimizar los riesgos que conlleva el consumo, controlando la calidad de lo que se consume. En este sentido, lamentó que tal vez la iniciativa no tuvo la suficiente difusión por lo que se banalizó su contenido.

"Producción, adquisición, acopio y expendio estarán definidos en este proyecto", explicó Bango.
Agregó que se trata de construir el mismo esquema de regulación para las cuatro principales drogas que se consumen en Uruguay: alcohol, tabaco, psicofármacos y marihuana —que al momento es la única cuya comercialización no está regulada—.

El proyecto indica, entre otras cosas, que cada persona pueda consumir hasta 40 gramos por mes; autocultivar hasta seis plantas con una licencia que también se usaría para elaborar datos estadísticos. Aquellos que estén interesados podrían crear clubes de membresía para cultivar en grupo, con un número determinado de plantas por año.

Entre otras cosas, se le encomendará al Sistema Nacional de Educación la elaboración e implementación de políticas públicas que atiendan la educación y prevención relacionada con la temática y al Sistema Nacional Integrado de Salud, una política acorde.

"Asimismo se creará un instituto nacional de control y regulación del cannabis y, aisladamente, una oficina de seguimiento y evaluación de toda la política pública responsable del tema. También se creará un consejo consultivo", agregó Bango.

Finalmente aclaró que el proyecto incluye la regulación del mercado, además del autocultivo, porque, para los casi 25 mil consumidores diarios de marihuana, esto último no sería viable.
 "Si vamos a hacer una regulación, se debe incluir la venta para atender a todo el universo de los consumidores", señaló.