El edil Frente Amplista Herman Alsina le dijo a Rochaaldia
que fenómeno de la circulación masiva de
vehículos por nuestras vías, asociado a las características de cada una de
ellas, en cuanto al volumen que sostienen diariamente, ha provocado
innumerables problemas en puntos considerados como conflictivos por la
confluencia de varias vías en un pequeño espacio, o bien porque en la ubicación
urbanística tenga una especial consideración en el tránsito por zonas
especialmente intensas.
Alsina resalta que la
evolución en el estudio de soluciones viales a los problemas de siniestralidad
, y también de paralización del ritmo del tráfico, es que se han incorporado
el desarrollo de las rotondas . La supresión de intersecciones
conflictivas y el cambio por rotondas, en distintos puntos de la ciudad de
Rocha capital ó tomando como ejemplo las que se encuentran en Ruta nacional 9 ,
desencadena una fluidez en el tráfico que además le proporciona unos términos
de seguridad importantísimos.
Cabe señalar manifestò el edil que en una rotonda o glieta los que se hallen
dentro de la vía circular, tendrán preferencia sobre los que pretendan ingresar
a ella. Si este criterio no puede cumplirse por razón del tráfico, deberá estar
debidamente señalizado. En ausencia de señalización, rige el criterio general
expresado.
Es por eso que quienes transitamos periódicamente por ruta 9
de Rocha al este, hemos acompañado el proceso de construcción de 2 rotondas
modificadas, una a la salida de la ciudad y la otra en la entrada al camino, el
arbolito.
Vemos con preocupación y máxime teniendo en cuenta el
aumento de flujo de transito en la zona en los próximos meses de cara a la
temporada estival, que a más de 2 meses de estar dicha construcción todavía no
tenga pintura fosforescente ni marca luminosa de ninguna índole ni sobre la
construcción ni en la ruta.
Reitero, en lo personal transito periódicamente ese trayecto
y he tomado la iniciativa de formular
este planteo en la junta departamental
,lo cual obedece a la necesidad de que a la brevedad se señalice como
corresponden esos lugares, hasta por que el sistema de balizas existente aparte
de muchas veces no prender la mayoría, son un obstáculo que potencia el
peligro.
En cuanto a los
peligros que pueden derivarse de la circulación por rotondas, es muy común que
quien no conoce la vía por la que circula, no sabe exactamente dónde se
encuentra la salida que debe tomar, y por tanto, no ha elegido el carril
adecuado para el destino. Así, ocurre que se invade inconscientemente otro
carril, pensando con cierto temor en que perdemos nuestra salida. Realmente, el
comportamiento adecuado en caso de que nos equivoquemos, supone un daño muy
pequeño. La posibilidad de continuar la circulación dentro de la rotonda, y dar
un giro completo para volver a intentar salir adecuadamente, es la opción más
correcta que tenemos que tener siempre en mente, como respuesta automática
asociada a la seguridad vial, y evitar cualquier tipo de siniestralidad indeseada, e involuntaria. Otro error común,
y muy peligroso, es la velocidad de acceso a las rotondas, que suele ser muy
superior a la permitida. De este modo, se producen aceleraciones innecesarias
que desencadenan la utilización inadecuada y negativa de los carriles de las
rotondas, invadiéndolos descontroladamente y sin ningún tipo de señalización.