lunes, 12 de septiembre de 2016

Se descubre en Uruguay red de espionaje político que operó hasta 2009.

Un allanamiento realizado en el domicilio del fallecido coronel Elmar Castiglioni resultó en la incautación de voluminosa información de inteligencia militar.

El “archivo Castiglioni” está revelando la existencia de escuchas telefónicas e intervención de comunicaciones de altos funcionarios de gobierno, incluidos algunos ex presidentes como Julio María Sanguinetti y el actual mandatario Tabaré Vázquez.

“No hubo una modificación ni de las políticas ni de las estrategias de inteligencia militar utilizadas en dictadura. Cuando volvió la democracia en 1985 la inteligencia militar siguió operando exactamente igual que antes.


Y yo creo que eso se prolongó en el tiempo hasta 2009 porque ninguno de los gobiernos tuvo la voluntad política de reestructurar las fuerzas armadas y depurarlas de aquellos elementos que venían de la dictadura”, opinó el periodista uruguayo Samuel Blixen en entrevista con Gps Internacional.

“Muchos objetivos eran integrantes de partidos políticos legales. Se han llegado a interferir conversaciones telefónicas de altos dignatarios de gobierno, por ejemplo de Tabaré Vázquez cuando era Intendente de Montevideo en 1990”, dijo. “También algunos sindicatos en períodos específicos como durante las marchas contra la privatización de empresas públicas. No parece haber un condicionamiento ideológico. Abarcó a todos los partidos políticos”, agregó.

“El gobierno de Tabaré Vázquez en 2008 estaba enterado porque la Ministra de Defensa había autorizado una acción de contra inteligencia que había detectado la existencia de ese archivo paralelo o clandestino”, señaló Blixen. Otras figuras del panorama político que se señalan entre los investigados por el archivo personal de Castiglioni son, entre otros, el Gral. Líber Seregni, Carlos Julio Pereyra, Mirtha Guianze y el ex presidente Jorge Batlle.